17 actividades divertidas para hacer con niños en casa

Para entretener a los niños en casa, se pueden realizar diversas actividades divertidas y creativas.

Algunas ideas incluyen juegos de mesa, actividades artísticas, juegos de rol, juegos de movimiento y lectura de cuentos, así como también se pueden realizar actividades al aire libre dentro del hogar.

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1. Escuchen historias interactivas juntos

Las historias interactivas capturan la atención de los niños al combinar texto, imágenes y sonidos. Incluso mejora la relación con tu pequeño.

Esta misma situacion me paso a mi con mi pequeño cuando Mateo empezó a tener mas independencia sentia que ya no pasabamos tiempo juntos asi que probé con historias que pudieramos escuchar juntos y alli escuchamos “Llegó el verano” en Storybook.

El cuento no solo lo tranquilizó, también abrió la puerta para hablar de sus emociones sin presión. Ahora, cada noche es una oportunidad para conectar en familia ❤️ Descubre tú también cómo una historia puede transformar la rutina de tus hijos.

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2. Pintura con los dedos

La pintura con los dedos permite a los niños explorar colores y texturas de una manera sensorial y divertida.

Estas actividades para niños hiperactivos son artísticas e ideales para desarrollar la motricidad fina y la expresión creativa.​ 

Utiliza pinturas no tóxicas y fáciles de limpiar para garantizar una experiencia segura.

Puedes encontrar ideas y técnicas en sitios como Pinterest.

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 3. Manualidades con materiales reciclados

Transformar materiales reciclados en juguetes o decoraciones es una excelente manera de fomentar la creatividad y la conciencia ambiental en los niños.

Al reutilizar objetos como botellas, cajas o rollos de papel, los pequeños aprenden sobre la importancia del reciclaje mientras desarrollan habilidades manuales.​

Esta actividad estimula la imaginación y la destreza motriz fina.

Puedes encontrar ideas inspiradoras en plataformas como Pinterest, donde se comparten numerosas manualidades con materiales reciclados.

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4. Afirmaciones positivas

Después de una semana complicada, la familia de Mateo encontró en “Paz en tus pensamientos” de Storybook una forma diferente de conectar. 

Su hijo estaba ansioso y no lograban calmarlo... hasta que probaron este cuento.

Lo escucharon juntos antes de dormir, y no solo lo ayudó a relajarse, también abrió la puerta para hablar sobre lo que sentía.

 Ahora es su rutina favorita. ¡Descubre cómo una historia puede cambiar la noche (y el corazón) de tu peque! ❤️📖

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5. Crear un collage de revista

Hacer un collage con recortes de revistas permite a los niños expresar sus ideas y emociones de forma visual y aplicar actividades sin pantallas para niños.

Esta actividad mejora la coordinación mano-ojo y la planificación.​

Reúne revistas viejas, tijeras y pegamento, y anima a los niños a crear composiciones temáticas o abstractas.

Puedes encontrar tutoriales en línea para guiar esta actividad. 

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6. Hacer títeres con calcetines viejos

Crear títeres con calcetines es una forma divertida de reutilizar prendas y fomentar la creatividad.

Los niños pueden inventar personajes y representar historias, desarrollando habilidades lingüísticas y sociales.​

Solo necesitas calcetines limpios, botones, hilo y otros materiales decorativos.

Existen numerosos tutoriales en línea que muestran cómo hacer títeres paso a paso. 

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7. Juegos de memoria

Los juegos de memoria fortalecen la concentración y la retención de información en los niños.

Además, son una excelente manera de pasar tiempo en familia.​

Puedes encontrar versiones imprimibles o digitales de estos juegos en sitios como Árbol ABC. 

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8. Yoga para niños

El yoga adaptado para niños es una herramienta poderosa para ayudarlos a relajarse, mejorar su concentración y fortalecer su cuerpo de forma suave. 

No se trata solo de estirarse, sino de conectar con su respiración y aprender a identificar cómo se sienten por dentro.

En nuestra casa, ha sido clave para calmar la energía antes de dormir o después de un día agitado.

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9. Experimentos científicos simples

Realizar pequeños experimentos en casa es una forma emocionante de despertar la curiosidad de los niños.

Esta actividad les permite aprender conceptos científicos básicos de manera práctica y visual con actividades de relación para niños, convirtiendo el aprendizaje en una experiencia divertida.

Desde mezclar vinagre con bicarbonato hasta hacer un volcán casero, estos experimentos desarrollan habilidades de observación, hipótesis y análisis.

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10. Juego de clasificación de colores y formas

Este juego consiste en utilizar objetos del hogar (como tapas de botellas, bloques o figuras de papel) para que los niños los clasifiquen por color o forma.

Es ideal para niños en edad preescolar, ya que fortalece su percepción visual y la lógica básica.

También ayuda a desarrollar la atención y la motricidad fina.

Puedes crear tu propio set usando papel de colores, platos desechables o cajas pequeñas como bandejas para clasificar.

Es sencillo de montar y muy entretenido.

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11. Circuito de obstáculos en casa

Diseñar un circuito de obstáculos con cojines, sillas, cintas y mantas convierte el hogar en una divertida pista de habilidades.

Es una forma excelente de mantener a los niños activos y trabajar su coordinación, equilibrio y resistencia física.

Además, promueve la resolución de problemas y el trabajo en equipo si se hace con hermanos o padres.

Solo necesitas algo de espacio y creatividad para crear estaciones como saltos, túneles y zonas de equilibrio.

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12. Carrera de sacos en el pasillo

Con unas fundas de almohada grandes o sacos de tela, los niños pueden competir en una carrera divertida sin salir de casa.

Esta actividad fomenta el ejercicio físico, la cooperación y la competencia sana entre hermanos o amigos.

Solo necesitas despejar un pasillo o espacio largo para evitar obstáculos peligrosos.

Puedes usar una cuerda o cinta adhesiva como línea de salida y meta, haciendo que los niños participen incluso en la preparación del juego.

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13. Música y baile

Poner música y dejar que los niños se muevan libremente es una de las formas más naturales y efectivas de liberar energía y emociones.

Bailar al ritmo de canciones alegres o seguir coreografías sencillas ayuda a mejorar la coordinación, el equilibrio y el sentido del ritmo.

Además, cantar o tocar instrumentos caseros (como maracas hechas con arroz y botellas) fortalece el lenguaje, la creatividad y la expresión emocional.

Puedes crear una lista de reproducción familiar con sus canciones favoritas para convertir este momento en un hábito diario lleno de alegría.

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14. Juego de matemáticas con objetos domésticos

Con utensilios comunes como cucharas, tapas o botones, puedes crear juegos matemáticos simples para que los niños practiquen contar, sumar o agrupar.

Esta actividad convierte las matemáticas en algo tangible y fácil de entender para los más pequeños.

Los niños desarrollan el pensamiento lógico y la capacidad para resolver problemas cotidianos.

Solo necesitas una superficie plana y algunos recipientes para organizar los objetos según el ejercicio que propongas, como contar por pares o clasificar según tamaño.

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15. Preparar una pizza casera

Hacer pizza juntos no solo es delicioso, también es una excelente oportunidad para que los niños se involucren en la cocina, sigan instrucciones y tomen decisiones (como elegir los ingredientes).

Estimula la autonomía y la creatividad.

Amasar, cortar y decorar la pizza fortalece la motricidad fina y les enseña sobre alimentación saludable.

Puedes usar una receta sencilla y dejar que ellos participen desde el inicio, incluso en el armado de la masa.

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16. Hornear galletas juntos

Hornear galletas es una actividad completa que combina matemáticas (medición), ciencia (reacciones al hornear) y vínculos emocionales.

Los niños disfrutan el proceso desde mezclar los ingredientes hasta ver cómo se transforman en el horno.

Además de estimular los sentidos, refuerza valores como la paciencia y el trabajo en equipo.

Usa moldes divertidos o déjalos crear sus propias formas para que sientan que realmente hicieron algo suyo.

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17. Construcción con bloques

Jugar con bloques de construcción ayuda a los niños a desarrollar habilidades espaciales, coordinación y pensamiento lógico.

Al crear estructuras, los pequeños también fomentan su creatividad y paciencia.​

Existen diversos tipos de bloques adecuados para diferentes edades, desde bloques grandes para los más pequeños hasta piezas más complejas para niños mayores.​

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